El cuerpo humano necesita de la vitamina A, porque es la encargada de funciones determinadas, que otras vitaminas o nutrientes no son capaces de efectuar.
En el cuerpo humano, puede haber carencia
de vitamina A, por dos razones muy básicas. Una de ellas es que se esté
suministrando algún otro nutriente que inhibe y reduce los niveles de vitamina
A en el organismo. Y el otro caso es que se presente algún síntoma relacionado
con la falta de vitamina A, todo esto y mucho más, se estará aclarando a
continuación.
Si se está tomando vitamina E en
niveles más altos de lo normal o de lo recomendado, para algún propósito
determinado, es necesario implementar una dieta más alta de vitamina A, ya que este
disminuye, si su dieta consiste en vitamina E.
Cuando se presenta la incapacidad
de visión nocturna, llamada ceguera nocturna (visión borrosa, opaca, débil) va
conjuntamente relacionada con la falta de vitamina A en la dieta (la vitamina
A, esta relaciona con la producción de rodopsina, la cual está encargada de fortalecer
la visión nocturna) por ello, si se presenta este síntoma, es con todo
seguridad que su organismo carece de esta vitamina. Este actúa evitando muchos
desequilibrios y desordenes de la visión. Su implemento y necesidad en este
caso es considerablemente alto. Tanto los músculos que rodean los ojos, como
los nervios centrales que se encargan de la visión, ellos necesitan de este nutriente,
para efectuar las funciones debidas. Lo que ocurre, es que la membrada de la córnea
del ojo se reseca, produciendo esta enfermedad llamada xerosis.
En la lactancia, el organismo
exige una cantidad relativamente más alta de vitamina A, debido a la perdida de
leche materna. No solo en la lactancia, también en el embarazo se recomienda
una dosis estable de vitamina A.
Se puede presentar alguna anomalía
de vitamina A, cuando la piel pierde su capacidad celular, este produce que los
agentes dañinos perforen la piel con más facilidad, por lo que el cuerpo tiende
a desintoxicarse con mayor rapidez. También pude causar resequedad en la piel. De
la misma manera funciona como inmunidad de los tejidos epilépticos (piel, y la
mucosa de la vía respiratoria). Los tejidos son afectados, cuando se carece de
esta dicha vitamina, ya que este actúa en las células desarrolladoras y el
crecimiento de los tejidos del organismo.
Si en nuestra dieta, no hay equilibrio
de ingesta de nutrientes como grasas y minerales que son importantes para el
adecuado proceso de adsorción de la vitamina A, no podrá ser debidamente adsorbida
por el aparato intestinal.
La A, forma parte del grupo de
vitaminas liposolubles, estas se mantienen almacenas en el organismo durante semanas
e incluso meses, en el caso de la vitamina A, que se almacena en el hígado en
su mayor parte, se debe tomar como prioridad principal, que la ingesta alta de
cinc, puede activar a expulsar el almacenamiento de vitamina A del hígado, por
lo que una persona puede necesitar o carecer de esta vitamina, solo incrementando
en la dieta los niveles de cinc. (Cinc es un oligoelemento, que forma parte de
los minerales).
Cuando la ingesta no supera los
700g UI para los hombres a partir de los 14 años y 550g UI en el caso de la mujer a
partir de los 14 años, se pude estar padeciendo de esta vitamina. Debemos saber
que alimentos son ricos en vitamina A, así no estar sufriendo los síntomas ni
el desorden que puede provocar su deficiencia.
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